Sevilla se une a los actos de denuncia y recuerdo del asesinato de Francisco Javier por delito de odio por orientación sexual

Organizaciones andaluzas se unen a la convocatoria de la organización Respeta, en recuerdo de Francisco Javier, un homosexual vallisoletano fallecido tras una brutal paliza.

Mañana sábado 27 de octubre, se realizarán actos en recuerdo de Francisco Javier, Javi, un hombre homosexual que falleció el pasado mes de septiembre por las heridas producidas en una agresión por delito de odio, un brutal apaleamiento ocurrido en agosto de 2018.

La asociación Respeta ha convocado actos en Madrid y Sevilla, que tendrán lugar a las 21:00 h. En Sevilla, el lugar elegido es el Centro Cívico Las Sirenas, en la Alameda de Hércules.

El manifiesto y convocatoria de este acto, está apoyada por las organizaciones andaluzas Adriano Antinoo, AlmensIRIS, Amare LGTBI, Andalucía Diversidad, DeFrente LGTB, Junt@s Tod@s por la Igualdad, Libres LGTBI y Togayther.

En Madrid, está convocatoria cuenta con el apoyo por la Arcópoli, Cogam, FELGT y Transexualia.

MANIFIESTO:

Francisco Javier era su nombre, Javi su nombre de día a día, La Ely como se le conocía en la noche y en las fiestas.

Tenía 59 años, infinitas experiencias y una gran energía positiva que hacía vibrar felicidad a quien tuviese cerca. En Valladolid, su ciudad todes lo querían. Era la estrella de la fiesta, explosivo, divertido, una gran persona como escribieron quienes le conocieron en las redes sociales. Fue pionero en los años 70 en mostrarse tal y como era, fue de los que empezaron a construir con su visibilidad el camino hacia la libertad que muchos, muchas, muches hoy tenemos. Nunca se escondió de nadie. Siempre lo veías rompedor. Se llevó muchos palos e insultos, pero siempre puso su sonrisa como bandera y calló los prejuicios que atacaban al colectivo LGTBQI.

Su fuerza y espíritu que dio tanta visibilidad, donde pocos la dieron, sirvió de ejemplo para que con el tiempo otros, otras, otres empezasen a luchar.

El pasado 12 de agosto sufrió una brutal agresión, presuntamente a manos de un menor de 15 años que se entregaba por la tarde, y desde aquel día ingreso en el centro para menores Zambrana de Valladolid.

Desde aquel 12 de agosto Javi, La Ely mantuvo su lucha en el Hospital Rio Hortega. Hasta que quedo sin fuerzas el pasado 22 de septiembre y falleció por la brutal paliza que sufrió cuando ese menor se ensaño con él, que aquel día, como muchos otros, se había travestido para salir de fiesta.

La pelea, no, la agresión que recibió ya que no se defendió, fue más que brutal. Su cuerpo apareció desnudo. Oficialmente ha sido un robo con violencia, la policía descartó Delito de Odio. Desde las asociaciones no pensamos igual y por la agresividad y saña, con la que se agredió a la víctima, la cual inconsciente en el suelo siguió recibiendo golpes. No destacamos un presunto agravante de Delito de Odio por su orientación sexual. El colectivo LGTBQI, Unido en esta lucha no vamos a descansar hasta que haya Justicia para Javi, La Ely.

La Ely, a sus 59 años, nació en un mundo muy diferente al que tenemos hoy.  Siempre tuvo el apoyo y amor de su familia. Algo que tampoco era habitual en aquellos años 70 cuando Javi visibilizó su forma de ser, su reivindicación desde la alegría por vivir en igualdad y libertad. Como nos contaron sus allegados desde el cariño, Javi un día se hizo un peinado que parecía electrificante, de ahí la empezaron a llamar la eléctrica, que más tarde fue La Ely. Conocida en la noche, las fiestas y las mejores discotecas.

Sabemos desde sus allegados más cercanos que aquella persona que fue alegría, escudo, y mama o papa de muchos, muchas y muches en los armarios que con su apoyo directo, rompieron. Le toco muchos días llorar en soledad por los insultos que recibía, por amores de gente armarizada que no se atrevía a salir de esas cárceles emocionales en las cuales se sigue viviendo en nuestra España profunda y no tan profunda, aunque su amor ayudo a abrir a otros  para volar en libertad todos los días, y aun llevándose los palos del rechazo, nunca se rindió, tenía la fuerza y el espíritu de salir a la calle con alegría y amor hacia los demás. 

No había nadie como ella con tal desparpajo para romper con lo políticamente correcto, para enseñarnos a que nuestros derechos, los Derechos LGTBQI se consiguen día a día, trabajando y luchando entre todos, todas, todes por mantenerlos y ampliarlos.

Por Javi, La Ely.

Queremos Justicia!!!